Después de
unas agónicas pesadillas que le trajeron un mal descanso y un extraño dolor
general. El futuro Camthaliön se despertó, y se encuentro en una diminuta
cabaña en un bosque, postrado en una cama y con vendajes en todo su cuerpo.
Todo le daba
vueltas y una extraña luz desdibujaba todas la figuras a su alrededor. Como
consecuencia tenía un dolor de cabeza como si una manada de elefantes hubiera
pisoteado su cerebro y como premio se hubieran paseado por su cuerpo para
rematarlo.
Pudo advertir
como una figura negra se giraba para poder verlo. Pero las fuerzas le
flaquearon en ese punto y volvió a ser presa del sueño y la inconsciencia.
A continuación
y como fin a otro “alegre y ecuestre” tour por sus mundos del sueño. Pudo
volver a abrir los ojos y esta vez encontró la cara de un anciano mirándole fijamente
y ofreciéndole una taza de algo humeante.
-
….
–el joven intentó decir algo pero por algún motivo no sentía las cuerdas
vocales ni los labios-
-
Chissst
–dijo el viejo- tranquilo te he ahorrado la molestia de intentar hablar y
acabar gritando de dolor, te he aplicado unos hechizos curativos y he
anestesiado tu aparato fonador durante un tiempo.
El viejo no
debió de percatarse de la cara del muchacho o si lo hizo no decidió hacerle
caso. En estos momentos le estaba dedicando una poderosa mirada de odio y en
cierto punto extrañeza.
Pasaron cinco
aburridos días 1 en los cuales el chico poco a poco fue recuperando la
vitalidad y la energía gracias a los modales del viejo. Eso si estaban famélicos,
los dos el viejo parecía seguir una estúpida dieta a base de pan y agua y
cuando llevas sin cocinar vete tú a saber cuándo. Es normal que pierdas
facultades y cometas deslices alimentados a enfermos2.
1. Creerme si
que fueron aburridos, al chico no paraba de dolerle la cabeza y se pasaba prácticamente
el día y la noche durmiendo. Mientras que el viejales no es que fuera precisamente
el alma de la fiesta…
2. “Pequeños”
deslices como que se te olvide cocinar la carne. No le quites las raspas al
caldo de pescado, o mi favorito. Adereces los pescados con tierra. Bueno, él dirá
que no lo hizo a posta, pero al quinto día se le cayó un pescado a la tierra y
se lo dio con cierta malicia al enfermo… eso sí después le comento el incidente
y el por qué de ese sabor tan peculiar. Afortunadamente seguía con la garganta
anestesiada y no podía moverse excesivamente.
me encanta el nuevo diseño del blog! te ha quedado con un aire profesional, esta genial :)
ResponderEliminarhe leido el ultimo capitulo de Eiloc, y parece interesante, asi que aprovecho y te animo a seguir escribiendo, esta muy bien
y un consejo: cuando veas que no te viene la inspiracion y que no puedes escribir nada, concentrate en algo determinado, un sentimiento, una sensacion, y escribe sobre ello
el resto de las palabras surgiran casi sin que te des cuenta :)
un saludo, y animo!
Como siempre un lujo tenerte por el camino ;)
ResponderEliminarLa verdad, es fantástico que una persona a quien admiro pro su escritura me digas esas cosas (para que me vas poner rojo) :)
Pues voy a probar tu tecnica.
bueno es lo que comentábamos antes por Mps, cuando estabamos cabreados :)